Uno de los aspectos más importantes cuando adoptamos un conejo es enseñarle a usar un lugar específico para hacer sus necesidades. Afortunadamente, los conejos son animales muy limpios por naturaleza y aprenden rápido si se les guía con paciencia y constancia. Aquí te explicamos cómo hacerlo de forma efectiva y fácil:
1. Asociación del olor
Cuando el conejito haga pipí o cacas fuera del lugar deseado, recoge las cacas y absorbe el pipí con papel. Luego, llévalos directamente a la bandeja o esquinero que hayas preparado. Esto le ayuda a asociar ese lugar con el olor de sus desechos y entender que allí es donde debe ir.
2. Limpieza de zonas incorrectas
Es muy importante desinfectar bien el lugar donde se haya equivocado. Así evitamos que el olor quede impregnado y que el conejo vuelva a hacerlo en el mismo sitio. Lo más recomendable es usar vinagre de manzana, que es natural, seguro para ellos y neutraliza bien los olores.
3. Accesibilidad y ubicación estratégica
La bandeja o esquinero debe estar fácilmente accesible para el conejo, sobre todo durante los primeros días de adaptación. Un truco muy efectivo es colocar la bandeja justo debajo de la henera, ya que muchos conejitos hacen sus necesidades mientras comen heno.
4. Crear un entorno cómodo
En las zonas donde no quieres que haga sus necesidades, puedes colocar:
Alfombras de bambú o tela que no asocie con el baño.
Empapadores reutilizables lavables, que protegen el suelo y son fáciles de limpiar.
Estos elementos permiten que el conejito no resbale y esté cómodo, pero sin confundir esas zonas con el lugar de hacer pipí o caca.
IMPORTANTE
Constancia y paciencia: especialmente durante la primera semana, que es clave. El conejo está adaptándose a un nuevo entorno, y es el momento ideal para enseñarle rutinas.
Evita castigos o gritos: los conejos no entienden este tipo de correcciones. Es mucho más efectivo redirigir y reforzar conductas correctas.
Observa sus patrones: si detectas que tiende a usar siempre una esquina determinada, puedes colocar allí una bandeja para aprovechar esa preferencia natural.
Con un poco de tiempo y atención, tu conejito aprenderá a usar su esquinero o bandeja sin problema, y esto facilitará enormemente la convivencia. Recuerda que cada conejito tiene su ritmo, y lo más importante es ofrecerle un entorno seguro, limpio y lleno de cariño.